Hug March es un ambientólogo que investiga las dimensiones socioeconómicas y tecnológicas y culturales del cambio socioambiental, especialmente a nivel urbano y en la dimensión agua, a través de una disciplina relevante, la ecología política. Su experiencia le ha llevado a ser catedrático en Transición Ecológica y Ecología Política ya impartir docencia en torno a la sostenibilidad en diferentes grados y másteres de la UOC. Hablamos con él sobre ecología política, cambio climático y los retos de la transición ecológica.
COAMB- ¿Cuándo supiste que querías dedicarte al mundo académico y la investigación?
Hug March-Estudié Ciencias Ambientales en la UAB (2001-2005), terminando la carrera con una beca Séneca en la Universidad de Granada. Inmediatamente después vi claramente que quería entrar en el mundo académico y la investigación. Gané una beca predoctoral de la Generalitat de Catalunya para realizar el doctorado en ciencias ambientales (especialidad economía ecológica), y empecé a colaborar como docente con el Departamento de Geografía de la UAB haciendo docencia en Ciencias Ambientales y Geografía. En el transcurso de mi tesis fui investigador predoctoral visitante en la Universidad de Manchester, centro de investigación puntero en ecología política. Posteriormente, una vez con el doctorado terminado, llevé a cabo una estancia postdoctoral sobre escenarios de futuro en la gestión del agua en el INRA y en el Geosciences Environnement de Toulouse. En 2012 llego a la UOC con un contrato postdoctoral Juan de la Cierva. Más adelante, en 2015, paso a ser investigador senior del grupo del Laboratorio de Transformación Urbana y Cambio Global, del IN3 (UOC) y en 2018 me convierto en profesor agregado de los Estudios de Economía y Empresa de esta universidad. Posteriormente devengo catedrático en Transición Ecológica y Ecología Política, impartiendo docencia en diferentes grados y másteres de la UOC.
COAMB- ¿Qué objetivo tienes a la hora de enseñar sobre sostenibilidad a tus alumnos?
HM– A nivel de grado, imparto docencia en Desarrollo Sostenible en el Grado de Turismo y Economía Ecológica en el grado de Economía. En estos grados intento “ambientalizar” los currículums y garantizar que los estudiantes adquieran pensamiento crítico en el campo de la sostenibilidad. A nivel de máster, dada la heterogeneidad de programas en los que estoy, me muevo entre asignaturas de cambio climático, gestión de los recursos hídricos o sostenibilidad urbana, entre otros. Como académico, uno de mis objetivos centrales es desarrollar docencia en el campo de la sostenibilidad con impacto social a nivel global en un contexto de emergencia climática, transición digital y fragilidad de los límites planetarios.
COAMB- ¿Qué es la ecología política exactamente?
HM-La ecología política es una “comunidad de práctica científica” que epistemológicamente articula una “transgresión disciplinar”. Entiende que las relaciones sociales, tecnológicas y culturales son inseparables de las transformaciones ambientales y se interesa por las causas de la degradación ambiental con impactos desiguales, las relaciones de poder que sostienen el cambio ambiental y los efectos inesperados de los discursos y prácticas dominantes en el campo de la sostenibilidad. Cuando la ecología política pone el foco en la sostenibilidad urbana lo hace desde la ecología política urbana, centrándose en las desigualdades socioecológicas constituyentes y resultantes de los procesos de (re)configuración urbana así como prefigurando transformaciones ambientales alternativas.
COAMB- ¿Cómo puede servirnos la ecología política para entender la actual crisis socioambiental?
HM– Las crisis socioambientales actuales exponen estructuras de vulnerabilidad y desigualdad extremas en múltiples geografías y dimensiones (género, origen, estatus socioeconómico, etc.), tanto en el Sur Global como dentro de las sociedades más prósperas, caso por ejemplo de muchas ciudades del Norte Global. Entender las geografías y dimensiones de esta vulnerabilidad diferencial a las crisis ambientales así como la manera desigual de cómo se insertan e impactan las medidas para afrontarlas es clave para prefigurar trayectorias alternativas justas, emancipadoras y democráticas. Precisamente la ecología política puede contribuir en ese sentido.
COAMB- Tu grupo de investigación de la UOC es el TURBA Lab. ¿Cuál es el objetivo de este grupo?
HM– El Laboratorio de Transformación Urbana y Cambio Global (TURBA Lab), dirigido por el catedrático Ramon Ribera Fumaz, es un grupo de investigación del Internet Interdisciplinary Institute (IN3) de la UOC. Tenemos un modo de organización con diferentes líneas de investigación, de las que lidero la de ecología política y somos un colectivo de investigadores provenientes de distintos campos de las ciencias sociales, ambientales, humanidades, urbanismo y arquitectura. A grandes rasgos, TURBA investiga los procesos económicos, culturales, políticos, tecnológicos y ambientales así como los metabolismos, acciones y flujos que producen y transforman el mundo en el que vivimos. Lo hacemos analizando la composición multidimensional de las transformaciones socioambientales y sociotecnológicas desde una aproximación crítica que integra consistentemente por un lado las dimensiones económica, política y ecológica, y por otro, su complejidad geográfica.
COAMB- ¿A qué conclusiones está llegando desde este laboratorio?
HM– Nuestro grupo detecta la falta de investigación crítica interdisciplinar que desentralle los impactos desiguales e inesperados de la transición ecológica a escala urbana y metropolitana a la vez que explore sus posibilidades transformadoras. Precisamente éste es uno de los aspectos que exploramos en nuestro grupo de investigación, donde existen fuerzas investigadores con perfil de ciencias ambientales (ya sea graduados en Ciencias Ambientales, con másteres relacionados o doctores ambientólogos).
COAMB- ¿En qué trabaja ahora en el TURBA?
HM– Más allá de investigaciones puestas en marcha en resiliencia urbana, adaptación al cambio climático o geografía urbana, nuestro grupo actualmente se interesa mucho por la intersección entre digitalización y gobernanza ambiental. Con el proyecto DEMO (2023-24), liderado por mis compañeras, las doctoras Zora Kovacic y Lucía Argüelles, llevaremos a cabo una investigación empírica para examinar los imaginarios y prácticas de digitalización de la gobernanza ambiental, con el objetivo de cubrir una laguna importante de investigación e informar a las políticas públicas. Junto con profesionales del ámbito de la ingeniería de las telecomunicaciones, también queremos cubrir un vacío de investigación muy relevante sobre la comprensión de los imaginarios e implicaciones socioambientales de la infraestructura digital.
COAMB- ¿Qué significa para ti ser uno de los investigadores más citados de 2021 según la lista publicada por la Universidad de Stanford?
HM– Para mí supone una visualización de mi trayectoria en ecología política y reconocimiento de su impacto a nivel académico internacional. También es un reconocimiento colectivo al trabajo realizado desde el grupo de investigación TURBA (Laboratorio de Transformación Urbana y Cambio Global, del IN3) y de los Estudios de Economía y Empresa en el campo de la sostenibilidad, contribuyendo a la tan necesaria transición ecológica para afrontar los retos socioambientales actuales, entre ellos la emergencia climática.
COAMB- Tus investigaciones sobre ecología política se han dirigido sobre todo en el impacto del ámbito urbano. ¿Qué deben hacer las ciudades para ayudar a frenar el cambio climático?
HM– La transición ecológica contempla la escala local como lugar privilegiado a través del cual incidir en nuestra relación con los límites planetarios y la emergencia climática. Conceptos como resiliencia urbana, economía circular urbana o ciudades inteligentes condensan los esfuerzos de transición ecológica de los sistemas socioeconómicos hacia entornos más habitables y adaptados al cambio socioambiental buscando la neutralidad en emisiones de gases de efecto invernadero. A veces, sin embargo, si no existe un interés genuino de cambio real estos “grandes conceptos” que a priori parecen disruptivos pueden acabar operando como significados vacíos que no dirigen las causas estructurales de los problemas socioambientales.
COAMB- ¿Por tanto que deben hacer los actores políticos para que el cambio sea real?
HM– Cualquier política pública que persiga la sostenibilidad, o más concretamente quiera dirigir la cuestión climática, debe ser inclusiva y debe preocuparse no sólo por índices abstractos de sostenibilidad ambiental sino por cuestiones de justicia ambiental. En este sentido, las ciudades deben abordar la emergencia climática con estrategias tanto de mitigación como de adaptación que sean transformadoras y emancipadoras, coproducidas con las comunidades locales y que persigan objetivos de justicia social y equidad.
COAMB- Eres miembro del COAMB. ¿Cómo sientes que el Colegio representa y defiende tu profesión y vela por una Cataluña más sostenible?
HM– El COAMB es un actor imprescindible para hacer pedagogía a la sociedad catalana sobre la importancia que tiene que el perfil de ambientólogo/a. Cada vez vemos más ambientólogas y ambientólogos ocupando posiciones de responsabilidad en materia ambiental en diferentes administraciones, instituciones, empresas, etc. y creo que el COAMB ha sido parte constituyente de ese impulso.
COAMB- Muchas gracias por tus reflexiones, Hug.